miércoles, 26 de octubre de 2011

CENTRO CRISTIANO PALERMO
Domingo 23 de Octubre 2011

La Peor de las Contaminaciones
Marcos 7.14-23

· Remedios ridículos: Al motor le falla un pistón: así que lo llevo al lavadero para ver si mejora. Me duele el estómago, así que me froto Ratisalil. Me declaran un cáncer y me tomo una aspirina para ver si se me va.
· La contaminación es una preocupación de todos, y cada tanto los líderes del mundo se reúnen para ver si hay solución… pero, ¿está mejor el mundo?
· A nivel personal, la contaminación es de otra índole y algo que nadie puede curar.

A. LA CONTAMINACIÓN FALSA: LO QUE ENTRA. 7.14-19

· Jesús llama la multitud para explicar la diferencia entre la contaminación real y la imaginaria.

Definición. La contaminación externa es basada sobre la noción judía que lo que uno toca afecta su alma, y que se limpia al lavarse.
Efecto o Resultado. Según el A.T., esta contaminación separa al individuo de:
a. La adoración de Dios (por tocar un cadáver, un leproso, una mujer en su período, etc.)

b. El servicio de Dios (los sacerdotes tenían que seguir ritos muy severos de limpieza)

c. El pueblo de Dios (leprosos vivían afuera de la ciudad y gritaban “¡impuro, impuro!” si alguien se acercaba).

Soluciones.
En lo religioso: Los fariseos pensaban que imponiendo más reglas religiosas, eliminaban la contaminación. En Levíticos 11 hay una lista de alimentos prohibidos para el pueblo judío; pero Jesús en Hechos 10 mostró a Pedro que había hecho limpio todos los alimentos. Los fariseos creían y enseñaban que la contaminación se producía por tocar algo o alguien impuro y se limpiaba con un lavado ceremonial (versos anteriores).
Pero la contaminación no es un problema físico, sino moral. Lo que sale de uno muestra la realidad de lo que uno es. Lo que comemos o hacemos o no, no nos afecta.

En lo secular: ¿no pasa algo similar? El humanismo evolucionista dice que el hombre es bueno, pero es “víctima” de su situación—ya sea pobreza, falta de educación o de oportunidades, etc. Luego para “ayudar” al hombre, se pasan mil leyes más.

· Tan arraigada era la enseñanza de los fariseos que ni los discípulos pudieron captar lo que Jesús quería demostrar (17-19)

B. LA CONTAMINACIÓN VERDADERA: LO QUE SALE. 7.20-23

· No es un problema externo, sino más bien espiritual.

Definición: La verdadera contaminación es:
Espiritual. Comenzó con el pecado de Adán y Eva. Luz a oscuridad. Vida a muerte.

Universal. Desde entonces todos nacemos pecadores. El primer bebé fue un asesino.

Cosa seria. …”todas estas maldades” (23). Dándose las circunstancias, el hombre es capaz de todo. La lista es larga:

· Malos pensamientos. Que es la raíz de todo lo que sigue.
· Adulterios. Actividad sexual ilícita por personas casadas.
· Fornicaciones. De “porneia” y se refiere a cualquier actividad sexual ilícita, resultado no por una necesidad del cuerpo sino de una mente perversa.
· Homicidios. Aun si hay odio hacia otro. 1 Juan 3.15.
· Hurtos. Aun se aplica a los que no dan de sus ofrendas y diezmos. Mal. 3.8-9
· Avaricias. Un deseo insaciable para lo que otros tienen.
· Maldades. O “malicia” y se refiere a medios en que malos pensamientos se llevan a cabo.
· Engaño. Maniobras diseñadas para la ventaja de uno. Hacer algo para derribar a otro. Obrar con decepción.
· Lascivia. Comportamiento sin restricciones, vergonzosas. “Hago lo que quiero y no me importa lo que otros piensen!”.
· Envidia. Desear la prosperidad de otros.
· Maledicencia. Un hablar que hiere o difama a otros o a Dios (blasfemia). Chisme.
· Soberbia. El exaltarse a uno mismo. “Mira lo que yo he hecho. Nadie es como yo”. Todo lo opuesto a la humildad.
· Insensatez. Los que no tienen sentido común en lo espiritual o moral. No ven sus pecados, ni ven al Señor obrando en sus vidas. No hay iluminación espiritual. No conocen a Dios ni quieren conocerlo.

· El amontonarnos un montón de leyes no va a arreglar el problema del corazón. Por fuera todo puede estar bien, pero por dentro… Son como “sepulcros blanqueados”.

· La verdadera contaminación comienza en el corazón desobediente. Lo que es indecente o inmoral debe causar asco al hijo de Dios, al que es espiritual. Si Cristo mora en su corazón, no va a tener lugar para estas cosas.
· Jesús supo que el hombre es pecador y somos capaces de todo pecado. C/u aquí es capaz de cometer todo pecado de la lista y aun más. Todos aquí son culpables de algunos de estos pecados y bien lo saben.
· Pero necesitamos reconocerlo y confesarlo al Señor, y debe haber un verdadero arrepentimiento. Si sigo en ellos, afectará mi relación conmigo mismo—“no es lo que como, sino qué es lo que me come a mí”; con otros, y especialmente con Dios, pues el pecado me separa de Él.
· Jeremías 17.9 – "Engañoso es el corazón y perverso, ¿Quién lo conocerá?” Aun el creyente sabe que en su carne “no mora el bien” según Rom. 7.18. Dios no se propone a reformar el corazón sino a transformarlo. Nos da una nueva naturaleza.
· Podemos aplicarnos intentos inútiles como reglas, abstenciones, ayunos, peregrinar a Luján, etc. Pero todo eso no mejora y aun quizás empeora la situación.

C. SOLUCIÓN – LA PERSONA DE CRISTO.

Problema - Solución - Resultado
Pena del pecado - Cristo murió por mí - Paz con Dios
Práctica del pecado - Cristo vive en mí - Victoria
Presencia del pecado - Cristo volverá por mí - Perfección final

Conclusión—v. 23. “De dentro salen”. Ya están allí. No podemos sacarlos. Necesitamos un poder más grande desde afuera. Necesitamos a Cristo que invada nuestro corazón. Apocalipsis 3.20 "Estoy a la puerta y llamo. Si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él y él conmigo". ¿Está Cristo reinando en tu corazón???