miércoles, 10 de abril de 2013

Efesios 3.1-7 - EL GRAN MISTERIO


CCP – 7-4-13

El Misterio de la Iglesia

Efesios 3:1-7


·         ¿Has estado en la cárcel alguna vez?  Si uno está en la cárcel por una causa noble, puede que se lamente por malos tratos, o puede considerarse abanderado por una misión noble. La cárcel llega a ser o un castigo, o un privilegio.  Cuando nos persiguen o pasamos adversidades como cristianos, puede que nos consideremos víctimas de la sociedad o victoriosos en Cristo.

·         Cap. 1 resalta la obra del Padre;  cap. 2, la del Hijo; 3 el Esp. Santo.

·         Que la persona es salvo por la gracia (2.1-10), y que está reconciliado con los demás creyentes y consigo mismo a traves de la obra de Cristo; y que ahora es parte con todos de un mismo cuerpo, la iglesia, no fue revelado en los planes de Dios. Es lo que Pablo menciona como “misterio”

·         Pablo fue elegido para revelar, hacer conocer, y explicar tres grandes “misterios”—1) el Evangelio y todos sus detalles (Rom, 1 y 2 Cor, Gál).   2)  La iglesia como un cuerpo de Cristo (Ef, Col); y   3)  La segunda venida de Cristo (1 Cor 15; 1 Tes 4).

·         Pablo recién había resaltado la unidad en la iglesia de Jesucristo.  Ya no hay más motivo de odio racial ni social, que era muy prevalente en ese día.  Hoy??

A.      El Portavoz de este Misterio.  3:1-4

1.  La Condición de Pablo (1)

·         Por esta causa” vuelve a las enseñanzas anteriores que Judíos + gentiles en Cristo = la iglesia, un cuerpo.  Casi parece que iba a comenzar otra oración, que al fin en v. 14 lo hace.

·         vv 2 a 13 forman un paréntesis, retomando al pensamiento en v 14.  El “yo Pablo” significa que viene algo importante.

·         Pablo fue hecho prisionero (Hch.28.16,30) porque obedeció a Cristo a pesar de la oposición.
·         Aun su condición como prisionero en Roma, Pablo sabía que no pertenecía a Nerón, sino a Cristo.  Y Dios lo puso allí “por vosotros los gentiles”, ya que su predicación a gentiles lo llevó a estar allí.

·         Preso” – No en una cárcel sino en una casa alquilada, pero según algunos comentaristas, encadenado a un soldado. Podía recibir visitas, pero no podía salir de allí.

·         Sin duda los judíos se enojaron con Pablo por enseñar que la ley se anulaba y que Jesús estaba construyendo una nueva humanidad, un templo nuevo.  Ya no había divisiones.

·          Pero también Dios lo puso allí usándolo para el bien de la iglesia a los gentiles.  Allí escribió tres cartas de mucho valor para la iglesia.

2.  La Suposición de Pablo (2)

·         “Si” – en griego es una “condición de primera clase”, lo que no implica una duda, sino certeza.  Se puede traducir “debido a que” o “seguramente han escuchado”.   Pablo supone con certeza que ya habían oído de su condición. “Ya que” sería una buena traducción.

·         “administración”—economía (oíkonomian), dispensación, ministerio.  Se refiere al plan administrativo de  Dios para la iglesia y de todas las cosas.  A Pablo se le dio la responsa-bilidad en revelar este plan.   

·         Este ministerio fue importante a Pablo (vv 2-5), a los gentiles (6-8), a los ángeles (9,10) y a todo creyente (11-13).

3.  La Revelación a Pablo (3)

·         “Revelación” – Ro 16:25; Gál 1:11,12.  Pablo afirma que no describió este misterio por leer libros, o porque alguien se lo contó.  Fue por revelación directa de Dios.

·         “misterio”—aparece 6 x en Efesios.  Se refiere a una enseñanza que no fue dada en el AT.  Algo desconocido e imposible de conocer aparte de una revelación directa de Dios.  Ya había escrito sobre esto brevemente en capítulos anteriores (1:13-14; 2:11-22). Un buen “misterio” es 1 Cor. 15.51-53.

·         Es una verdad escondida del conocimiento o comprensión humana, pero descubierta por la revelación de Dios. Era nuevo porque en otros tiempos no se dio a conocer (9).

4.  La Intención de Pablo (4)

·         “Leyendo”  públicamente lo que sigue, podamos entender esta revela-ción, la esencia de la cual está en v 6—que los gentiles ahora junto con los judíos tenemos una misma base en la iglesia.  El conocimiento de Pablo era amplio y seguro—nunca una duda.  (APL)

B.      El Mensaje de Este Misterio.  3:5-7

1.  Los Recipientes de este Misterio (5)

·         “Otras generaciones”— “otras” = distintas, de otra clase, diferentes.  O sea, en el AT esto no se dio a conocer.

·          La idea de que un gentil puede salvarse no era nueva, pero lo que no se declaró antes es que el gentil gozaría de las mismas bendiciones de salvación que los  judíos, sin que se hagan judíos los gentiles.  Pero sí se dio a conocer a los apóstoles y profetas del NT (2:20).

·         En algunos casos, apóstoles y profetas eran la misma persona, ya que los apóstoles profetizaban. Eran santos no en el sentido supersticioso, sino que se reconocían que eran apartados por Dios para ser sus instrumentos.  Notamos que Pablo no dice que él era el único recipiente de esta revelación.  Pedro (Hc 10) y Felipe (Hc 8) también eran recipientes.

2.  La Esencia del Misterio (6)

·         Con tres palabras Pablo describe los privilegios de los gentiles salvos, usando el prefijo “con” o sun :

a.   “coherederos”—de tres palabras griegas:  sug klero noma (“junto” + “llamar” + “nombre”).  Heredamos un mismo nombre tanto gentil como judío.  Pertenecemos a la misma familia, tenemos las mismas promesas. Tenemos el mismo status legal.  Incluídos LEGALMENTE en el cuerpo de Cristo.

b.   “comiembros”—susswma (“junto” + “cuerpo).  Hay igualdad en la relación personal con Dios; nadie tiene más privilegios en Cristo. Incluidos CORPORALMENTE—no más diferencias.

c.   “copartícipes”sumetoka (“juntos” + “participar). Es compartir algo en común.  Gozamos juntos la presencia del Esp. Santo. (Gál.3:14).  Incluidos SOCIALMENTE en recibir sus promesas.

·         O sea, ESTAMOS JUNTOS.

3.  El Ministro del Misterio (7)

·         Pablo se regocija en su privilegio de ministrar este evangelio.  Seguramente recuerda su experiencia en el camino a Damasco cuando Cristo desplegó su poder al cambiar su vida.
Este ministerio Pablo considera un don dado por la gracia de Dios.