CCP – 8-4-12
LA DIFERENCIA DE UN SOLO DÍA
Marcos 16.1-8
· ¡Cuánto puede cambiar la vida en un día! Un día está el marido. Al otro día ya se fue. Un día piensas que estás bien, al día siguiente descubres que tienes una enfermedad terminal, que no hay esperanzas de trabajo y de pronto te cae un trabajo que paga más de lo que esperabas, etc.
· El día en que murió Jesús quizás fue el día más oscuro de la historia. Al ponerse el sol, también se oscurecieron las esperanzas de sus seguidores.
· Marcos es el único evangelio que nos habla de ese sábado terrible entre su muerte y resurrección. Seguro que fue miserable para los que amaban al Señor. Pero Marcos nos lleva de ese día trágico al domingo glorioso cuando el mundo cambió para siempre.
· Antes de ver el pasaje, ¿Qué importancia tiene la resurrección?
· Frank Morison – uno que no encontraríamos en una iglesia los domingos, pero era un abogado británico respetable, educado, pero escéptico hacia el cristianismo. Fue influenciado por Tomás Huxley, un famoso evolucionista que negaba los milagros.
· Para asentar su creencia que Cristo nunca resucitó de los muertos, Morison comenzó a escribir un libro. Poco se dio cuenta al principio que el libro terminaría totalmente opuesto a lo que se propuso. Su libro, “¿Quién Removió la Piedra?” llegó a ser una de las mejores defensas de la resurrección corporal de Jesucristo. En su prefacio escribió:
Este estudio es en cierta manera tan inusual y provocativa que el autor cree que es deseable aquí mencionar brevemente cómo el libro llegó a tomar su forma presente.
En un sentido, no pudo haber tornado otra forma, pues es esencialmente una confesión, la historia interna de un hombre que originalmente. se dispuso a escribir una clase de libro y se encontró obligado por la mera fuerza de las circunstancias el escribir otra clase muy distinta.
No es que cambiaron los hechos, pues están grabados en forma imperecedera en las páginas de la historia humana. Pero la interpretación puesta sobre estos hechos sufrió un cambio. De alguna manera cambió la perspectiva—no en forma repentina, como en un relámpago de inspiración, pero lentamente, casi en forma imperceptible, por la misma tenacidad de los hechos y pruebas.
El libro como originalmente fue planificado , se dejó a la deriva, como esas barcazas del Támesis que salen a alta mar. Un día el autor descubrió que no solo no podía escribir el libro como una vez lo había pensado, pero que no lo haría aunque sí lo pudiera hacer.
· ¿Qué pruebas hay de la resurrección?
1. La evidencia física. Los soldados ya lo vieron muerto cuando vinieron a romperle las piernas; luego le traspasaron la lanza (Juan 19.32-33). Luego el testimonio del centurión en Marcos 15, y la preparación para enterrarlo.
2. El silencio de la tumba. La tumba fue sellada para evitar que se roben el cuerpo y digan que Jesús resucitó; además se puso una guardia permanente de soldados. Luego… la piedra removida y la tumba vacía.
3. Las apariciones de Jesús a mucha gente.
· Morison concluye su libro: “Puede haber, y como piensa el autor, cierta-mente HAY una base profunda e histórica para aquella frase en el Credo de los Apóstoles: ‘Al tercer día resucitó de entre los muertos’”.
· Si podemos confiar en algo en la Biblia, podemos confiar en la resurrección de Jesús. Como Pablo dice: “si Cristo no resucitó, entonces vana es nuestra predicación, y vana también es nuestra fe”.
· Veamos entonces qué pasó con esa visita de las tres mujeres a la tumba.
1. UN PROPÓSITO NOBLE. 1-3
a. Su Deseo: Ungir el cuerpo de Cristo. Pero, ¿concordaba con lo que Jesús había prometido? Habían mirado cómo murió Jesús, cómo su cuerpo fue puesto en una tumba, cómo se puso una piedra sobre la entrada (Marcos 15.46-47). Al amanecer el domingo, fueron para ungir el cuerpo de Jesús, no para embalsamarlo (no era costumbre judía), sino para que el olor de la descomposición sea enmascarado. Lo querían hacer por amor. No podían el día anterior pues era el Shabatt especial, el Día de la Fiesta de Pascua.
LA DIFERENCIA DE UN SOLO DÍA
Marcos 16.1-8
· ¡Cuánto puede cambiar la vida en un día! Un día está el marido. Al otro día ya se fue. Un día piensas que estás bien, al día siguiente descubres que tienes una enfermedad terminal, que no hay esperanzas de trabajo y de pronto te cae un trabajo que paga más de lo que esperabas, etc.
· El día en que murió Jesús quizás fue el día más oscuro de la historia. Al ponerse el sol, también se oscurecieron las esperanzas de sus seguidores.
· Marcos es el único evangelio que nos habla de ese sábado terrible entre su muerte y resurrección. Seguro que fue miserable para los que amaban al Señor. Pero Marcos nos lleva de ese día trágico al domingo glorioso cuando el mundo cambió para siempre.
· Antes de ver el pasaje, ¿Qué importancia tiene la resurrección?
· Frank Morison – uno que no encontraríamos en una iglesia los domingos, pero era un abogado británico respetable, educado, pero escéptico hacia el cristianismo. Fue influenciado por Tomás Huxley, un famoso evolucionista que negaba los milagros.
· Para asentar su creencia que Cristo nunca resucitó de los muertos, Morison comenzó a escribir un libro. Poco se dio cuenta al principio que el libro terminaría totalmente opuesto a lo que se propuso. Su libro, “¿Quién Removió la Piedra?” llegó a ser una de las mejores defensas de la resurrección corporal de Jesucristo. En su prefacio escribió:
Este estudio es en cierta manera tan inusual y provocativa que el autor cree que es deseable aquí mencionar brevemente cómo el libro llegó a tomar su forma presente.
En un sentido, no pudo haber tornado otra forma, pues es esencialmente una confesión, la historia interna de un hombre que originalmente. se dispuso a escribir una clase de libro y se encontró obligado por la mera fuerza de las circunstancias el escribir otra clase muy distinta.
No es que cambiaron los hechos, pues están grabados en forma imperecedera en las páginas de la historia humana. Pero la interpretación puesta sobre estos hechos sufrió un cambio. De alguna manera cambió la perspectiva—no en forma repentina, como en un relámpago de inspiración, pero lentamente, casi en forma imperceptible, por la misma tenacidad de los hechos y pruebas.
El libro como originalmente fue planificado , se dejó a la deriva, como esas barcazas del Támesis que salen a alta mar. Un día el autor descubrió que no solo no podía escribir el libro como una vez lo había pensado, pero que no lo haría aunque sí lo pudiera hacer.
· ¿Qué pruebas hay de la resurrección?
1. La evidencia física. Los soldados ya lo vieron muerto cuando vinieron a romperle las piernas; luego le traspasaron la lanza (Juan 19.32-33). Luego el testimonio del centurión en Marcos 15, y la preparación para enterrarlo.
2. El silencio de la tumba. La tumba fue sellada para evitar que se roben el cuerpo y digan que Jesús resucitó; además se puso una guardia permanente de soldados. Luego… la piedra removida y la tumba vacía.
3. Las apariciones de Jesús a mucha gente.
· Morison concluye su libro: “Puede haber, y como piensa el autor, cierta-mente HAY una base profunda e histórica para aquella frase en el Credo de los Apóstoles: ‘Al tercer día resucitó de entre los muertos’”.
· Si podemos confiar en algo en la Biblia, podemos confiar en la resurrección de Jesús. Como Pablo dice: “si Cristo no resucitó, entonces vana es nuestra predicación, y vana también es nuestra fe”.
· Veamos entonces qué pasó con esa visita de las tres mujeres a la tumba.
1. UN PROPÓSITO NOBLE. 1-3
a. Su Deseo: Ungir el cuerpo de Cristo. Pero, ¿concordaba con lo que Jesús había prometido? Habían mirado cómo murió Jesús, cómo su cuerpo fue puesto en una tumba, cómo se puso una piedra sobre la entrada (Marcos 15.46-47). Al amanecer el domingo, fueron para ungir el cuerpo de Jesús, no para embalsamarlo (no era costumbre judía), sino para que el olor de la descomposición sea enmascarado. Lo querían hacer por amor. No podían el día anterior pues era el Shabatt especial, el Día de la Fiesta de Pascua.
b. Su Devoción: Se levantaron antes de los demás, aun oscuro (según Juan), y en esa caminata de 3 kms., unas 30 cuadras, obviamente el sol ya amanecía. Su amor por el Señor las impulsó a comprar especias para así ministrarle una última vez.
c. Sus Dudas: ¿Quién movería la pesada piedra? Capaz que nos se les había ocurrido pensar en este problema cuando compraron las especias. Algunos estiman que la piedra podría haber pesado hasta media tonelada. Seguramente no sabían que Pilato habría puesto soldados para guardar la tumba para que los apóstoles no se roben el cuerpo. ¡Cuántas veces nosotros nos preocupamos por dificultades que quizás ya fueron quitadas de por delante en nuestro vivir para el Señor!
· Al acercarse a la tumba estaban llenas de dolor y tristeza. No buscaban un Cristo vivo, sino un cadáver frío. Estaban aun viviendo el día sábado! Habían confiado en que Jesús era el Mesías, así como los apóstoles.
· Creían que Él establecería el reino de Dios en este mundo. Pero luego todo se cayó allí al pie de la cruz.
· Muchos hoy viven ese día sábado: tristes en el mundo, esclavizados por el pecado, sin gozo ni paz, sin esperanzas y rumbo a la muerte eterna. Si solo apropiaran la verdad de que Jesús resucitó y hoy quiere librarlos de su pecado y darles otra vida!
· Esa madrugada las mujeres comprobaron que “por la noche durará el lloro, y a la mañana vendrá la alegría” (Salmo 30.15)
2. UNA PRESENCIA SORPRENDENTE. 16.4-6
a. La Piedra Removida, 4
· Mateo en su relato de la resurrección nos dice que hubo un gran terremoto, y que un ángel había venido a la tumba para remover la piedra. Al ver al ángel, los guardas quedaron como muertos allí. Esta es la escena a la cual llegan las mujeres.
· ¿Por qué fue removida la piedra? No para que el Señor saliera de la tumba, sino para que estas mujeres y luego los discípulos puedan entrar y comprobar que Jesús ya no estaba.
b. La Presencia Angelical, 5
· De los otros evangelios entendemos que este era un ángel, uno de los dos que menciona Lucas.
c. Las Palabras Asombrosas, 6
· Era un mensaje de paz: “No se asusten, no tengan miedo”. Al ver al ángel se habían asustado o espantado (5). Pero no había necesidad de tener miedo.
· Era un mensaje de poder: el ángel sabía porqué estaba allí. Confirma que fue crucificado y muerto. Cuando dijo “Consumado es” no hablaba de sí mismo, sino de su obra. El grito glorioso es que ¡HA RESUCITADO!
· Era un mensaje con pruebas: “miren el lugar donde lo pusieron”. Juan 20.6-7 nos dice lo que vieron: los lienzos que lo habían envuelto estaban allí como si el cuerpo se hubiera desvanecido. Y el sudario que envolvía su cabeza enrollado en otro lado. Una escena de calma y orden. No era lo que se esperaría si hubieran venido a robar el cuerpo
· Si los judíos hubieran robado el cuerpo, lo habrían producido cuando los apóstoles comenzaron a predicar que resucitó. Si los discípulos lo hubieran robado, no morirían por una mentira. El Señor vive y sigue obrando en corazones abiertos a Él.
3. UNA PROCLAMACIÓN GLORIOSA, 7-8
a. La Comisión: A llevar el mensaje a los discípulos. Según Juan, ellos estaban llenos de miedo y escondidos. Dios quería que sepan que Jesús estaba vivo. No había razón para temer, sino para gozar. Hay esperanza. Aun para Pedro, mencionado aquí, quien recién lo había negado. Vinieron ellas preocupadas sobre quién movería la piedra. Pero Dios ha usado el mensaje para mover piedras de millones de corazones para que crean en el Cristo vivo.
b. El Cambio; Volvieron a la ciudad con otro tipo de temor. Más bien de asombro, “desquiciadas”. Lo que vieron fue algo que no podían entender ni razonar. No esperaban lo que vieron.
c. La Consecuencia: Aunque Marcos nos dice que no hablaron con nadie en el camino, los otros evangelios nos dicen que fueron a los discípulos para decirles. Algunos corrieron a la tumba. Juan miró adentro y creyó. Luego Jesús aparecería a casi todos los discípulos (menos a Tomás)
· Por el testimonio de estas mujeres, muchos han salido de la oscuridad del sábado y han entrado a la maravillosa luz del domingo! Tal es el mensaje y el poder del evangelio. Y la persona que lo abraza pasa a ser un hijo de Dios a través del nuevo nacimiento. Es una nueva creación (2 Cor. 5.17)
· ¿Qué es para vos el mensaje de la resurrección? ¿Seguís viviendo ese sábado lúgubre y oscuro? ¿Qué la vida misma es una larga queja? ¿Sin esperanza?
· Así como Jesús resucitó a Lázaro en Juan 11, Él quiere darte nueva vida. Quiere librarte de tu sábado muerto, oscuro, depresivo, y quiere que experimentes el domingo de su paz, su gozo, su salvación. Está llamando a tu puerta y quiere entrar para cambiarte.
- ¿Estás viviendo un día sábado, o un día domingoen tu vida?
