martes, 9 de julio de 2013

LA NOVIA ANDA EN LUZ - Efesios 5.8-14

CCP – 14-7-13

La Novia Anda en Luz
Efesios 5.8-14

§         Novias en blanco… y negro
§         Luz vs. tinieblas…

1.      Eran oscuridad, ahora son Luz.  8

Ø       Todo el párrafo juega con el rico simbolismo de luz y oscuridad, el último representando ignorancia, error, maldad, perdición; y luz, la verdad, justicia, rectitud, salvación. En 2.1 el contraste era entre muerte y vida.
Ø       En 4.17-18 ya nos dio un vistazo al endurecimiento del pagano.  Nosotros éramos así antes de Cristo, pero ahora somos luz en el Señor. 
Ø       “No seáis” – lit. “dejen de ser”.  Todo hijo de Dios está en peligro de volver atrás si no se pone muy alerta a las sutilezas del enemigo.  Estamos en el mundo, pero no somos del mundo.
Ø       Notamos que no dice que estaban en oscuridad, y el creyente está en la luz.  Es verdad, pero Pablo dice que antes éramos tinieblas y ahora somos luz.  Así como el incrédulo personifica las tinieblas y las fuerzas que las controlan, el creyente debe personificar a Cristo.
Ø       El que está en Cristo, no solo circunstancias, sino su vida ha cambiado de oscuridad a luz.  Es una transformación que solo “en el Señor” es posible por nuestra unión con Él, ya que Él mismo dijo que era la luz del mundo.
Ø       Al ser “luz en el Señor”, por lo tanto hemos de vivir como hijos de luz.  Deben irradiar la luz que son y “debe notarse en su conducta” como dice la Biblia al Día.  Mat. 5.14

2.      Frutos buenos y frutos malos. 9-11

Ø      Estos vv. hablan de la demostración del cambio de vida que el Señor hizo.
Ø      En lugar de “Espíritu” debe ir la palabra “luz”.  Si bien Gálatas 5.22 habla del fruto del Espíritu, también sin luz, no puede crecer fruto.  Contrasta con el fruto de las tinieblas en v. 11.
Ø      v. 10 – ¿Estamos comprobando lo que somos?
Ø      ¿Qué fruto se ve en tu vida?  Rom. 6.21-22


3.      Deberes de los hijos de Luz.  11-13

a.      No asociarse con oscuridad, 11 (ver 7)

Ø      v.11 – No hemos de participar, no hemos de tener “nada que ver” (NVI) con el fruto del mal, sino que hemos de reprenderlas, denunciarlas – con el propósito de traer convicción o confesión de culpa.  ¿Es fácil? No – Juan 3.19-21;  1 Jn. 1.5-6
Ø      Lo que se hace en secreto muchas veces lo obviamos, en vez de sacarlo a luz.

b.      Denunciar obras oscuras, 11, 13

Ø      La denuncia del pecado, unido a la predicación de la Palabra de Dios producirá efectos positivos.  Lo que es hecho manifiesto, está expuesto a la luz.
Ø      Hay que denunciar, reprender, y desenmascarar las obras malas.
Ø      La verdad busca la luz y viene a ella y se hace visible.  La luz lo expone y esto es bueno.  Con la verdad se ve el mal tal como es sin posibilidad de conciliación o compromiso.
Ø      El creyente, al llevar una vida recta, actúa como freno a los que hacen mal, y hasta puede llevarlos a la luz.
Ø      Antes éramos oscuridad, ahora somos luz!

c.      Ni hablar de ellas,  12

Ø      Muchas veces es mejor no hablar de estas cosas, sino que predicando la verdad, esas cosas hechas en secreto desaparecen o se hacen claramente visibles.

4.      Exhortación Bíblica.  14

Ø      Pablo cierra su argumento con una cita adecuada de lo que quizás era un himno cristiano basado sobre pasajes mesiánicos como Isaías 60 y 52 (otro ejemplo es 1 Tim. 3.16).
Ø      Describe nuestra condición antes y después de Cristo.  No hemos de quedarnos vestidos del viejo hombre, o… ¿estamos dormidos?
Ø      Romanos 13.11Hagan todo esto estando conscientes del tiempo en que vivimos. Ya es hora de que despierten del sueño, pues nuestra salvación está ahora más cerca que cuando inicialmente creímos.
Ø      La conversión es  nada menos que despertarnos del sueño, levantarnos de entre los muertos fuera de la oscuridad y a la luz de Cristo.
Ø      “Te alumbrará Cristo” – para que tú y yo podamos reflejar la gloria del Señor y reprochar las obras de las tinieblas.  Al venir a Cristo, Él derramará sobre ti la luz de la verdad divina como el sol da luz a los que se levantan de su sueño.
Ø      “Tú eres la luz… no dejes que el mundo te apague”